El encuentro de ayer nos dejó detalles interesantes, tanto deportivos como extradeportivos. Entre los primeros destaca el larguero de Payet. Fue una jugada impresionante de Sissoko, en la que hizo gala de un poderío físico excepcional. Después de recorrer toda la banda, centró y Payet remató de volea, evidenciando su gran clase. Desafortunadamente el balón impactó en el travesaño. Hubiera sido un gol antológico.
El segundo detalle (anti)deportivo fue un agarrón de Sagna a Dzemaili en el último minuto de juego. Como ya comenté (aquí), es muy difícil ser árbitro. Sobre todo "contra" la anfitriona del torneo... La Eurocopa también tiene una dimensión extradeportiva. Constituye un impagable escaparate para las grandes firmas de ropa deportiva. Y ayer la industria alemana pinchó. Dos de sus marcas más reconocidas, Puma y Adidas, tuvieron un mal día en su posicionamiento global. La firma creada por Rudolf Dassler viste a Suiza. Durante el partido se rompieron cinco camisetas con la marca del felino. Es cierto que fueron el resultado de agarrones de jugadores galos, que llevan Nike. Pero la imagen es que cinco zamarras Puma quedaron desgarradas.
No tuvo mejor suerte la firma hermana-rival creada por Adi Dassler. El balón oficial que suministra Adidas estalló y tuvo que ser sustituido por otro. Además, en los tres partidos, Paul Pogba ha sufrido resbalones inoportunos. Calza Adidas. ¿Tendrán relevancia estas circunstancias o se quedaran en meras anécdotas? Me pareció ver a directivos de Nike con una sonrisa en los labios...
0 Comentarios