La Premier League vuelve a ser este año la
liga más igualada de entre todas las ligas europeas. La equidad de los recursos
económicos entre los clubes que la conforman permite tener una competición equilibrada
en la que muchos equipos pelean por idénticos objetivos.
Aun así, la gran cantidad de millones que
amasan los conjuntos ingleses no les ha asegurado hasta el momento un juego
brillante ni eficaz. Ya hace demasiado tiempo que un equipo de la Premier no se
toma como ejemplo de buen juego, o que un conjunto inglés no lucha por ganar
una Champions League. Más bien, las últimas actuaciones europeas de los equipos
ingleses han rozado el ridículo. Pero el fútbol inglés, que te podrá gustar más
o menos, permite las sorpresas y los resultados inesperados en cada jornada.
Que el Chelsea se haya visto con el agua al cuello y rozando el descenso, y que
el Leicester se vea con posibilidades de ganar el título, prueban que el
divertimento en la Premier League está más que asegurado. Por ello, la jornada de
este domingo pondrá en jaque el corazón de muchos aficionados. Y es que juegan
el primero contra el tercero y el segundo contra el cuarto. Lo más divertido de
todo, es que el primero se llama Leicester y el segundo Tottenham. Si a
principio de temporada nos llegan a decir que en la jornada 26 Leicester y
Tottenham estarían encabezando la liga inglesa nos hubiéramos reído durante un
buen rato. Pero así es la Premier, no hay quién la entienda.
El Leicester visitará el Emirates Stadium e
intentará repetir la hazaña de ganar a un rival directo fuera de casa, ya lo
hizo contra el City para encumbrarse como líder destacado de la competición, y
no parece descabellado que pueda repetir gesta ante el Arsenal, equipo que en
los días grandes siempre tiene la suerte de espaldas. Mientras, el Tottenham
visitará al City en un partido clave para medir las aspiraciones reales del
equipo de Pochettino. Si pensamos con la cabeza, Arsenal y City
son claros favoritos para llevarse los tres puntos y poner la Premier aún más
interesante, pero en esta competición nunca se dan los pronósticos más
presumibles. Dos cosas están claras, la primera es que no hagáis apuestas en
esta competición porque os veáis a quedar sin un duro en la cuenta. Y la
segunda, que pase lo que pase el domingo la Premier seguirá al rojo vivo.
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