Un 9 anda suelto

Luis Alberto Suárez Díaz tiene todos los números para convertirse en el próximo nueve del Fútbol Club Barcelona. Un puesto vacante en el Barça desde la marcha del sueco Zlatan Ibrahimovich. El delantero  centro que ahora milita en las filas del PSG nunca cuajó en el esquema de Guardiola y se fue por la puerta de atrás. Ahora, el Barça quiere recuperar una figura que, en mi opinión, nunca debería haber perdido. 

En este sentido Luis Suarez es el hombre ideal para Luis Enrique y su cuerpo técnico. El todavía jugador del Liverpool va bien de cabeza, tiene un gran juego de pies y un disparo endemoniado.  Es un nueve completísimo que domina casi todas las facetas del juego. Ahora bien, el delantero uruguayo deberá aprender a jugar en espacios cortos, a no ser que Luis Enrique tenga pensado utilizar un juego más rápido y directo.  

Sin embargo, el principal problema de su fichaje es su precio. El Liverpool lo renovó hace pocos meses y quién quiera llevarse a Luisito deberá rascarse el bolsillo.  Aunque, el club inglés está interesado en Alexis Sánchez y el chileno podría abaratar la operación. El otro problema es ver si Messi y Neymar encajaran bien la llegada de un delantero centro que busque más la portería que el pase fácil. Los Pedro y Alexis de turno siempre han pecado de pasársela antes a Messi que de rematar a gol, por mucho que estuvieran solos delante el portero y Leo tuviera un rival encima. La subordinación a Messi ha marcado el juego ofensivo del Barcelona desde la marcha de Titi Henry y Samuel Eto'o. Pero Suárez, delantero que en la Premier ha conseguido romper la barrera de los 30 goles en una temporada, buscará siempre el gol antes que el pase, por mucho que sean Messi o Neymar quienes le pidan la pelota. 

De momento, el delantero uruguayo sigue siendo jugador del Liverpool. El Barça tiene el sí quiero del jugador pero aún le quedan unas duras negociaciones con el club inglés. Por ahora, lo único claro es que si Suárez se quiere ir y el Liverpool no le deja, habrá algún directivo del club inglés que acabará con un buen mordisco en el cuello. De eso no tengo ninguna duda.