Ancelotti y su Madrid culminan un año irrepetible

Cuando Carlo Ancelotti llegó al Real Madrid muy pocos podían imaginar que el técnico italiano conseguiría ganar la Décima en su primer año al frente del banquillo blanco. Ancelotti llegaba después de la salida de Mourinho, quién dejó el club blanco hecho un polvorín, y con mil conflictos por resolver. La llegada de Ancelotti debía traer estabilidad, para poder dejar atrás una etapa donde la crispación y el belicismo mourinhista habían dinamitado la tranquilidad del club.

Por suerte para los blancos, Ancelotti ha traído paz y calma, pero también buen fútbol y títulos, que al final es lo que todo gran club desea conseguir. El primer título fue la Copa del Rey en Mestalla, contra el Barcelona, el rival que hasta no hace tanto se llevaba la mayoría de los títulos por los que luchaba el Madrid. Luego llegó la tan preciada Décima, ante el segundo gran rival de los merengues, el Atlético de Madrid. La épica de esa final la puso Sergio Ramos, con un gol en el último minuto que permitió llevar el partido a la prorroga. Al final, los goles de Bale, Marcelo y Cristiano dieron la Champions al Real Madrid. Después, ya en esta temporada, ganó la Supercopa de Europa al Sevilla, y este pasado fin de semana, consiguió  el Mundial de Clubes ante el San Lorenzo de Almagro. Ni el Papa Francisco pudo con la fe blanca. 

Y es que Ancelotti ha conseguido crear un equipo con las señas identitarias que siempre ha tenido el Madrid: pegada, contragolpe y velocidad. Pero además, el técnico italiano ha añadido juego y fútbol con cambios tácticos y fichajes que han aportado al Madrid lo que le faltaba, y lo han convertido en un equipo de fútbol temible en todo el mundo. Y es que los números del Real Madrid en este año  2014 son de miedo:

- 4 títulos: Copa del Rey, Champions League, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes. 
- 51 partidos ganados de 63 partidos jugados. 
- 178 goles a favor y 39 en contra.